domingo, 22 de junio de 2025

DÍA BUENÍSIMO, PRECIOSÍSIMO A COSTE CERO POR MIS TIERRUCAS CÁNTABRAS

 


Aquí es donde aparcamos el coche para empezar un día muy bonito, tranquilo, lleno de paz, de naturaleza, de silencio, de buenas vistas, de la compañía de mi amiga con su perruno, de risas y de conversaciones muy interesantes. ¡Qué bien lo pasamos los tres juntos!


Empezamos a caminar para hacer la ruta de la Mina de Udías, es un sitio muy bonito, muy tranquilo y es una ruta muy sencilla, cuando la hicimos fue estupendo porque todavía estaba nublado y no hacía calor, fuimos muy tranquilas, después al mediodía ya había salido el sol y picaba bastante.


Éstas eran las vistas que teníamos mientras caminábamos, como he dicho al principio pura naturaleza, disfrutando de nuestros verdes preciosos. 
La gente que es de fuera siempre dice que estos verdes tan potentes y con distintos tonos de color no los ven por otros sitios. Esto es el norte y por todo lo que llueve pues así de bonitos son nuestros colores.
La foto superior es lo que veíamos si mirábamos a la izquierda y si lo hacíamos a la derecha pues esta foto de rocas. Hay un sitio que la ruta también se puede hacer subiendo por esos sitios, pero como ya he dicho, nosotras fuimos por el sitio llano y sin prisa y disfrutando cada instante y respirando hondo para cargar nuestras pilas y coger energía para empezar la semana.
Aquí vamos a entrar en el primer 
túnel que hay, en ese no se ve nada, 
ni siquiera la salida, menos mal que llevábamos el móvil para poder alumbrar.
Cuando giramos ya es cuando se ve la salida, de verdad que parece sacado de una película, pero no, es la pura realidad y a mí me encantó, aunque entrar a oscuras me impactó un poquito.
Mientras íbamos caminando en algunos sitios se notaban mucho los trozos de acero restantes en el suelo, de hecho había que tener cuidado y mirar bien al suelo porque era fácil darte un golpe y poder tropezar o torcerte un tobillo.


Este es el otro túnel que hay que pasar, sin embargo en éste si se ve la salida antes de entrar, es más corto y no está en curva.
Como se puede ver en la foto, siempre estábamos rodeadas de árboles y de verde, así de bonita es la naturaleza, además estábamos disfrutándola a tope con una buena conversación , unas risas, también en ese momento observando al perro porque no paraba de oler por todos los lados, en esos momento no había nadie, solo pasaron al principio unos ciclistas.
A la vuelta si nos encontramos con más gente por varios sitios del camino.

Llegamos a donde estaba la maquinaria de la mina y fue donde comimos después de estar un rato por allí tranquilas, observando cosas y haciendo fotos y donde nos echamos una buenas risas jugando con nuestro perruno que es un amor.

La foto de la izquierda me pareció algo muy original, porque a las personas que amamos la fotografía nos llama la atención estructuras que pueden forman figuras y detrás de dichas figuras se ve un triángulo o una simple cuadrado. Esto lo entenderán las personas que saben un poco de fotografía. También es muy bonito porque jugamos con los colores como he hecho con la foto inferior, solo le doy color al fondo para que salga el color de la hierba detrás de la maquinaria y le haga destacar a ésta.


Sin embargo en estas fotos lo que he hecho es destacar un trozo del color de las hojas y el troco del árbol para que destaquen con el contraste del color blanco y negro del suelo. En la derecha simplemente es como si fuera una fotografía antigua y así le queda bien a los tonos de la foto de izquierda

Cuando ya regresábamos hacia el coche pues iba haciendo fotos a las cosas que me llamaban la atención por algún motivo, como esas preciosas margaritas y el contraste amarillo de las hojas, son pequeñas cosas que a mi me encantan porque no veo simplemente colores.
 Mi imaginación siempre me da el juego de ver cosas diferentes y sobre todo más allá que una simple imagen. 
Hace muchos años, una persona que sabía mucho de fotografía me dijo: Los amantes de las fotografía ven cosas que no ve nadie. En definitiva lo que puede ser una simple margarita pues o puedo ver otra cosa e incluso observar y ver un dibujo, una forma, etc...
Cambiamos de sitio porque en ese momento nos apetecía ver el mar para completar el día de naturaleza para tener variedad, además como he dicho al principio al mediodía ya hacía mucho calor y apetecía estar en un sitio fresco.


Esta playa tan bonita y tan especial para mí es Comillas. Comimos sentadas en ese muro dándonos el sol, se estaba muy bien y nuestro perrito se tumbó a la sobra que daba el coche, estaba cansaduco de la ruta y del calor que ya pegaba con ganas.
Después de comer nos estuvimos riendo bastante por una cosa que hizo mi amiga y que yo me puse como un tomate. Con mi amiga es imposible no reírse con la locura que tiene. Son momentos preciosos y las dos nos entendemos a la perfección, a veces solo nos basta con mirarnos.
Después de comer nos fuimos a dar un paseo por el pueblo y a sentarnos tranquilamente en una terraza entre sol y sombra que se estaba de lujo y nos tomarnos unos cafés que estaban buenísimos.
Volvimos a buscar el coche charlando y sin parar de reírnos porque cambiábamos de sitio y por el camino pensábamos donde ir.

Fuimos a la playa de Cóbreces que se llama Luaña y es preciosa, aunque había olas, mi amiga quería darse un baño, el agua estaba muy buena y se estaba muy bien porque estuvimos con el perro y se lo pasó muy bien, bueno nos lo pasamos. A pesar de mi miedo al agua, pues también estuve dentro como media hora y ese bañito me vino muy bien. Como he dicho había olas que eso todavía me daba más miedo. Pero una vez dentro del agua las dos, pues nos pasó una cosa que evidentemente no se puede contar por aquí, es una anécdota que se queda entre mi amiga y yo, pero que hizo que nos  estuviéramos riendo como media hora sin parar y cada vez que lo recordamos pues evidentemente nos vuelve a entrar la risa.

Esta playa a partir de ese día va a ser muy especial para mí porque siempre la recordaré por dicha anécdota y sobre todo porque estaba en compañía de mi amiga y siempre que la recordemos juntas nos volveremos a reír, es más, mi amiga cuando lea esta entrada seguramente se esté partiendo de risa. ¿A qué sí?.
Y así se acabó un precioso día de mayo.
Esta entrada se la dedico a mi amiga Noe, es con ella y con su perro con la he pasado este precioso día lleno de buenos momentos, de paz, de tranquilidad, ratos que realmente suman y son los que hay que quedarse y sobre todo los que se valoran, además como dice el título sin gastar un euro, nada que los cafés. Ella es como la naturaleza para mí porque me transmite paz, tranquilidad, risas, también me ayuda en algunas conversaciones que son difíciles para mí, ella me da esa confianza que necesito para poder intentar superar muchas cosas y sobre todo atreverme a hacer cosas para poder quitar miedos, tabús o vergüenza. En definitiva que me ayuda a que yo pueda dar pasos  a veces agigantados incluso sin darme cuenta a veces. Eso es lo bonito de la vida, sobre todo de la amistad, poder confiar, que tiendan esa mano que a veces se necesita tanto, que te apoye, que te aconseje, que te ayude y sobre todo que te haga disfrutar de la vida y de los buenos momentos. 
Noe, te mando un abrazo muy grande y sobre todo muchas gracias por estar siempre ahí. Y claro está que vamos a tener más momentos como estos e incluso mejores. Como dice una canción "Lo mejor está por venir". Te quiero mucho amiga.