NO PUEDO VIVIR SIN EL MAR

 Pues aquí estoy dando un paseo por la orilla del mar que tanto me gusta hacerlo,

 sola o bien con mi amiga la cámara que tanta compañía me hace y que tan buenos momentos paso al lado de ella y disfrutando a tope viendo las bonitas fotos que me salen.
Hacer fotografías al mar da mucho juego porque ninguna es igual, cada una es muy diferente y cada una expresa una cosa única, por sus colores, por su contraste, por su brillo, por su calma o su bravura.

 También me gusta mucho ver fotos del mar en color sepia, por que es como si

 hubieran pasado años y me hace recodar cuando lo visualizo en mi cabeza como podía estar y es como si lo viera en blanco y negro. También me gusta ver las fotos antiguas como la pequeña de la derecha, para ver como han ido cambiando los tiempos, de que todas las fotos eran en blanco y negro, aunque yo no las he llegado a conocer.

 Me gusta jugar con distintas opciones para hacer propias mis fotografías sin modificar. La superior es como si fuera un libro, la de abajo a la izquierda es

como una película y la de la derecha como un cuaderno, quedan bonitas y originales como a mi me gusta, por que soy una persona  a la que la gustan las cosas diferentes, únicas y originales.

 El vídeo representa la paz, la tranquilidad, el relax, la fuerza y la vida que me da estar al lado de mi querido mar, no puedo vivir sin estar a su lado, lo necesito en mi vida, lo mismo para verlo, sentirlo, escucharlo y respirando aire puro, fluyendo conmigo misma y dejándome llevar con el bonito sonido del agua hasta llegar a volar a mi imaginación.

 En esta foto la he hecho de cubo por que así se refleja el mar con la bravura de sus olas en todas las partes.
También trato de coger las olas cuando rompen en las rocas por que hacen un efecto muy bonito cuando sube el agua por los aires.
Me gusta mucho hacer fotos a la orilla cuando vienen las olas por la espuma blanca que dejan que queda muy chula y después cuando se va el agua se forman pequeños charcos que hacen reflejos de edificios, rocas u otros elementos que vistos en la foto quedan preciosos. Es una cosa que a veces es muy difícil conseguir porque el mismo reflejo no queda bien con el brillo.

 En las fotos inferiores simplemente estaba jugando con las nubes. Cuando te quedas mirando cinco minutos seguidos hacía las nubes, puedes ver como se forman algunas figuras, siendo algunas de ellas muy bonitas y muy originales. En la de la derecha a parte de hacer todo lo mencionado anteriormente, pues también he puesto un reflejo en la parte inferior de la foto.

Simplemente mirando el horizonte desde distintas perspectivas para sentir paz, tranquilidad, olvidarme de todo por un momento y simplemente llenarme de pensamientos positivos, dejando que mi amigo el mar se lleve todos los negativos y me recargue de energía renovada y vuelva a tener toda la fuerza que necesito que a veces las personas no saben dar.

 La última la he hecho como cuando se está en el cine cuando se está acabando la película que va reduciendo imagen y se va viendo en negro hasta llegar a su fin. Pues así he narrado yo hoy mi historia con el mar.

Ésta entrada se la quiero dedicar a mi amiga Mada que fue con ella con la que estuve en este lindo lugar y mientras ella hacía otras cosas, yo estaba fotografiando mi mar.
Hace casi veinte años que nos conocemos y cuando lo he necesitado me has ayudado en lo que has podido y me sigues ayudando.
Eres una amiga que quiero mucho  aunque nos veamos poco pues seguimos estando ahí las dos cuando se necesita.
Mada te dedico esta entrada por todo lo que he mencionado anteriormente y porque mis entradas del blog se las suelo dedicar a la gente que es especial para mi por algún motivo.
Deseo de todo corazón que puedas disfrutar de éstas bonitas fotos y sobre todo que te guste.
Un abrazo muy grande de una amiga que te quiere.